domingo, 26 de julio de 2015

R E F U N D A R

REFUNDAR - HACIA UNA SOCIEDAD OPCIONAL - Es el momento de hacer que las cosas sucedan: dinamizar y redificar la realidad





El siglo XX se agota en nuestros días, no finalizó cuando el almanaque marcó el año 2000. Viene descomponiéndose desde entonces poco a poco en todas partes. Por doquier huele a podrido bajo sus vestiduras capitalistas, comunistas, liberales, anarquistas y demás colección de emblemas moribundos.

A su vez, el siglo XXI despunta en múltiples situaciones, en su mayoría perceptibles solamente desde perspectivas mutatorias. ¡Mutantia Vive! así como la comenzamos a visualizar en 1980 asumiéndola como zona de lucidez implacable, territorio de recreación y no de cosmética adaptatoria. 

El ideal pionero de las ecoaldeas y de la permacultura requiere ahora una reformulación estructural donde en los planos urbano y rural --simultáneamente-- pasen a consolidarse los protagonismos fundadores imprescindibles. No mediante la enarbolación de banderías agotadas sino a través de iniciativas. Tampoco a través de meras denuncias circunstanciales de las falacias que deforman el genuino potencial humano de metamorfosis. El Sistema depredador, desde los tiempos del Feudalismo colonialista, sabe muy bien adaptarse a los embates críticos. Y asimila astutamente las auténticas novedades generacionales.

Es así: visualizamos una Sociedad Opcional con raíces convivenciales en las ciudades y en los pueblos del interior. Sin espectacularidad ni llamamientos altisonantes. Con base cooperativa y autónoma: enfocando en principio la alimentación sana, las energías renovables y la reeducación cotidiana. También con la circulación de materiales didácticos, radios libres y equipos de reflexión inventiva y contagiosa. Y encuentros fraternos. Somos la gente que estuvimos esperando.

ACTO RITUAL - 12 de agosto 20 horas - Bar Birmania - Cabrera al 5100 (Palermo)

martes, 21 de julio de 2015

Cada día un ladrillo menos en la pared


Los énfasis diseminados a través de la red social durante el reciente "Día del Amigo" dejan un extraño sabor amargo, no porque hayan sido insinceros sino porque se agotaron en sí mismos dentro del simbolismo ritual que los circuitos y sus equivalentes fomentan sin cesar. 

Mucho rito virtual, y casi ninguna propuesta operativa en la vida cotidiana. Aprecio simbólico, no encarnado en seres concretos sino en símbolos tipográficos. Un autismo colectivo mientras los políticos simulan la Democracia en torneos llenos de vacíos disfrazados de discursos. 

Estamos completando la ECO 14 conteniendo una serie de testimonios expresados por Otras Mentes. Con sencillez y sintonía aplicable a las necesidades urgentes de lucidez participativa. Nítidos abordajes vitales, pasos firmes hacia la transformación real, percepciones confluyentes.